sábado, 24 de agosto de 2013

Trasfondo: Carcharodons Astra

Buenos días!

Hoy os voy a dejar un pedacito del trasfondo que estoy creando para los Carcharodons (así podréis entender alguna de las entradas venideras del blog que estoy preprando). Este trasfondo es íntegramente mío, ya que el que han inventado los chicos de FW no me gusta nada, deja mucho a la imaginación y no concreta nada, así que he intentado darle mi propia visión o cómo me los imagino yo. Por tanto aquí os presento a mis Carcharodons:





ORIGENES

Aún no se sabe que llevó a los altos señores de Terra a autorizar una nueva fundación de un capítulo con la semilla genética de los Ángeles Sangrientos, conocida la imperfección que asola a los Hijos de Sanguinius; pero más raro que dar lugar a la fundación de un solo capítulo es que se permitiera la creación de dos capítulos sucesores gemelos en la vigésimo primera fundación, estos capítulos fueron los Lamentadores y los Carcharodons.

Tras su fundación a los Carcharodons les fue encomendada una sola barcaza de batalla, el Colmillo Sangriento y se les asignó un planeta situado en el extremo más exterior de la galaxia, en el sector ultima.



PLANETA NATAL

El planeta, sin nombre, fue bautizado por el capítulo como Aquis. Un mundo salvaje, de un tamaño similar a Terra iluminado por una potente estrella y sin lunas. Tan solo cuenta con un pequeño continente selvático situado en el ecuador y rodeado por completo de un mar que lo envuelve todo.

Los fieros humanos nativos del lugar se organizaban en pequeñas tribus que sobreviven gracias a la caza de los grandes reptiles y mamíferos que pueblan la selva y a la pesca de pequeños peces en las zonas próximas a la orilla, ya que si algo temen y respetan las tribus de Aquis es adentrarse en el mar, pues saben que una vez dejan atrás la costa y las aguas comienzan a ser profundas no son más que presa fácil de los depredadores de las profundidades; enormes Krakens de más de treinta metros pueden hundir las precarias embarcaciones con un solo tentáculo y sobretodo gigantescos escualos, de entre los cuales se erige como señor del mar el Megalodón, un tiburón capaz de engullir un Land Raider del Adeptus Astartes de un solo bocado.

Las tribus de Aquis acostumbran a llevar a sus difuntos al mar y enviarlos al horizonte en balsas de madera, pues creen que el paraíso se esconde en las profundidades de unas aguas que veneran y consideran a los Megalodones dioses regentes de dichas profundidades.

Cuando los Carcharodons llegaron a Aquis creyeron que sería un error destruir la selva y acomodar el continente a las necesidades que requeriría establecer allí la Fortaleza Monasterio capitular, ya que supondría mermar mucho las reservas de reclutas del capítulo, por tanto era preferible buscar un nuevo asentamiento, y a pesar de las reticencias del Mechanicus ese nuevo lugar fue una de las fosas abisales de Aquis. En el fondo del mar se erigió una de las maravillas más recientes que la humanidad ha sido capaz de construir: la Aleta del Escualo, una Fortaleza Monasterio que satisfacía todas las necesidades del capítulo y que además proporcionaba una formidable defensa ante un posible ataque enemigo evitando la necesidad de colocar generadores de escudo de gran potencia, que fueros establecidos en el continente, ya que la pérdida del mismo podría significar la destrucción del capítulo mucho más que la destrucción de la Aleta del Escualo.



SEMILLA GENÉTICA

Los Carcharodons abandonaron en el modo estricto el método de insanguinación llevado a cabo por su capítulo fundador a la hora de crear nuevos iniciados, en lugar de ello lo modificaron ligeramente influenciados por su nuevo ambiente que poco a poco iba modificando su personalidad y sus costumbres.

Para la creación de un nuevo Marine Espacial del capítulo los Carcharodons introducían al recluta en un sarcófago similar al empleado por los Ángeles Sangrientos con el aspirante sumido en un profundo sueño y con respiración asistida; pero además el recipiente era llenado de agua a la que se añadían unas pocas gotas de sangre.

En poco tiempo comenzaron a verse anomalías producidas por la semilla genética y por los métodos poco estrictos (incluso para un capítulo sucesor de los Hijos de Sanguinius) de activación de la misma. Los nuevos Marines emergían de su sarcófago pasado un año, y lo hacían con hendiduras a ambos lados del cuello, eran branquias iguales a las de los peces que les permitían respirar bajo el agua. Así mismo su piel, originalmente oscura fruto de su vida en el continente selvático de Aquis bajo un sol abrasador se había vuelto de un tono que variaba del blanco al grisáceo. Sus ojos carecían ahora de esclerótica, siendo completamente negros. Su sentido del olfato se veía incrementado. Su pelo, en los primeros días era rubio como el sol, pero en poco tiempo comenzaba a poblarse de canas acabando de color plateado. Pero sin duda el cambio más espectacular era ver a los nuevos Carcharodons recién salidos de su sueño con su nueva “dentadura”; por toda la encía asomaban tímidamente colmillos de borde serrado que en unas horas habían erupcionado por completo.

La visión de un Carcharodon recién convertido en Marine es terrible, pero lo es más su fiereza incontenible y sus ansias de combate para sentir la sangre fresca. A estos jóvenes escualos se les asigna normalmente a las escuadras de Tiburones Tigre, las escuadras polivalentes del capítulo y son apodados cariñosamente rémoras por sus hermanos más experimentados. Normalmente los rémoras no requieren de armas más allá de un bolter o pistola bolter si su nubladamente les permite usarlo para enviar alguna ráfaga de fuego al enemigo conforme se acerca con su escuadra; en ese momento sus manos y sus dientes se convertirán en la mejor arma para destrozar todo lo que se interponga en su camino, no importa lo dura que sea la armadura de la víctima pues una dentellada en el lugar oportuno llevará a la muerte.



¿Qué os parece?

Un saludo.
Mingu.

3 comentarios:

  1. ME gusta mucho las modificaciones, de hecho se ajusta perfectamente al trasfondo tan difuso de FW.

    Me gusta mucho ;)

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  2. Ya lo había leidos :( pero nunca me da pereza leer este pedazo trasfondo, cuando tenga mi ejercito bien ambientado haré el mio propio esta vez en serio.

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  3. A mi me encanta el proyecto, creo que me entusiasma tanto o más que mis Ángeles Sangrientos. En breve sangrientas novedades :D

    Un saludo.
    Mingu.

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