Trasfondo de mi Kill Team (Parte 3)

Buenos días!

Continúo con las entradas de trasfondo de los integrantes del Comando Lorenzo, y hoy vamos con el que seguramente sea mi favorito, Amareo.

A ver qué os parece:

Hermano Amareo

El Hermano Amareo proviene de los Desgarradores de Carne, es por tanto el puñal que atraviesa las líneas enemigas en combate sin inmutarse, o lo era hasta hace no tanto.

La semilla genética de Amareo comienza a despertar plenamente, su sed de sangre es cada vez más fuerte y el Sargento Lorenzo lo sabe, de hecho todo el comando lo sabe, y es que quedó patente cuando durante el transcurso de una operación de sabotaje de un potal de la telaraña sufrieron una emboscada por parte de miembros de la Legión Negra.

En ese momento, cuando Amareo vio el Ojo de Horus, asesino de Sanguinius, perdió totalmente el control de sus actos y cargó de forma casi suicida hacia los traidores a pesar de los intentos de sus hermanos de que no lo hicera.

Lo que sucedió después fue un espectáculo tan brutal que ningún miembro del Comando Lorenzo ha vuelto a comentarlo jamás. Amareo destrozó a varios Legionarios Negros con ayuda de su bolter mientras la rabia le llevaba hacia ellos, cuando les alcanzó su espada de energía atravesó el pecho de al menos seis herejes más llegando a romper la hoja con el último de ellos, y cuando solo quedaban dos, casi paralizados ante el relámpago de furia que tenían frente a ellos Amareo usó sus colmillos para arrancar la yugular de aquellos que una vez sirvieron al mayor traidor a la humanidad.

Diez marines de la Legión Negra fueron eliminados por un Amareo que era la furia misma de Sanguinius, con los ojos totalmente en blanco y la boca llena de sangre fue arrastrado por Gideon y Lorenzo lejos de la escena, de donde fue evacuado en cañonera Corvus.

Por un momento Lorenzo creyó que había perdido a su hermano, pues solamente los Hijos de Sanguinius conocen su maldición perfectamente, el demonio que anida en lo más profundo de sus almas; pero gracias al Emperador no fue así, Amareo recuperó la cordura y desde ese momento aconsejado por Lorenzo, al que toma casi como un guía espiritual, únicamente combate con armas de disparo siendo su favorita la escopeta gracias a la que puede saborear la muerte desde la distancia necesaria para controlar su Sed.

A pesar de todo Amareo sabe que está muy cerca del que podría ser su final como individuo para verse como Sanguinius en sus últimos momentos, y ese debe ser su último y gran combate como lo fue el del Ángel de Imperio. En ello radica la nobleza de los descendientes de Sanguinius, igual que él, sabiendo que todo está perdido, sabiendo que solamente queda por hacer aquello que es lo correcto, sabiendo que lleva irremediablemente a la muerte recorren el camino hasta el final, solamente, por deber.

Un saludo.
Mingu.